Casas De Empeño Y Compra Venta De Oro, Negocios Prosperos En Tiempos De Crisis

Cuando la crisis sacude nuestros bolsillos y llegar a fin de mes se convierte en una tarea poco menos que imposible ,se hace necesario buscar entre los cajones y dar salida a elementos y complementos de los que podemos prescindir. En este sentido las Casas de Empeño aceptan todo tipo de artículos, desde videojuegos hasta palos de golf. A su vez ,las tiendas de compara venta de oro también ofrecen la posibilidad de conseguir dinero en efectivo, a cambio de prescindir ,eso sí , de esa joya o ese motivo cuyo valor emocional sucumbe ante el económico.

En tiempos de crisis son muchos los negocios que cierran sus puertas, por motivos diversos.. Sin embargo otros las abren y con tan buena acogida, que apenas sí tienen un respiro para atender a la clientela. Las Casas de Empeño hacen furor en tiempos de crisis porque los ciudadanos encuentran en ellas un lugar donde poder depositar aquellos elementos prescindibles, a cambio de una remuneración en efectivo o un préstamo a tiempo pactado.

No es fácil ni cómodo deshacerse de nuestro televisor panorámico último modelo, ni del móvil de nuestros sueños, el portátil, la cámara de fotos, motocicleta, equipos de música y tantas y tantas cosas, conseguidas con esfuerzo, a las que debido a la crisis tenemos que renunciar, depositándolas en una Casa de Empeño. Pero así es el mercado.

Otro de los negocios florecientes en épocas de crisis es el de compraventa de oro. En este caso el metal precioso se convierte en valor refugio y los ciudadanos lo compran o lo venden ,dependiendo de su situación económica. El proceso de compra se ajusta a un protocolo completamente legal, en las tiendas especializadas ,donde analizan el producto para conocer su calidad. Los precios de mercado convienen tanto al comprador como al vendedor y benefician las expectativas de ambos.

La crisis económica instalada a nivel global y a nivel nacional ,está variando nuestro perfil de consumo: Si en épocas de bonanza económica los ciudadanos destinan sus ahorros a la adquisición de complementos y productos encaminados a incrementar su calidad de vida, en épocas de crisis económica y recesión ocurre todo lo contrario. Entonces hace necesario y muchas veces obligatorio, deshacerse de parte o de todo aquello que nos procuró satisfacción. Es decir, convertir la ilusión y sus efectos, en dinero en efectivo, contante y sonante.