Mucha gente en los paseos disfrutando del sol y de la brisa marina. Esta ha sido la estampa que ha mostrado Torrevieja durante el primer puente del año, con motivo de la celebración del Día del Padre.
A pesar de la crisis, los visitantes han acudido a su cita con la ciudad de la sal para disfrutar de un fin de semana que anuncia la ya inminente celebración de la Semana Santa y que preve una asistencia notable de ciudadanos que tienen ,en Torrevieja ,su segunda residencia.
Supermercados, restaurantes y tiendas en general, han tenido un respiro y han funcionado casi a todo gas durante estas fechas, lo que da pie para encarar el futuro próximo con moderado optimismo, muy a pesar de la actual coyuntura económica, poco o nada favorable para las grandes alegrías del consumidor.