Miles De Personas Presencian La Procesión Del Entierro Del Señor Revestida De Gran Solemnidad

Un total de 17 pasos, pertenecientes a las 14 cofradías de la Semana Santa torrevejense convirtieron las calles de Torrevieja durante algo más de seis horas en una auténtica vía Dolorosa con miles de personas en su itinerario dispuestas a presenciar el Solemne y Magno Entierro de Cristo en el Viernes Santo. La conocida como "Procesión General" recuperaba en este 2010 su itinerario habitual tras un periodo de varios años en los que por obras en distintos puntos de la ciudad, como la Plaza de Oriente, había tenido que ser modificado. Así, las calles Caballero de Rodas, Patricio Pérez, Ramón Gallud, Zoa, Ulpiano, y Del Mar volvieron a las escenas de antaño en un Viernes Santo que sorprendió por la gran cantidad de público asistente, a pesar de que las temperaturas habían caído sensiblemente. Aún así este año no ha sido mirar al cielo, ya que después de que en 2009 se suspendiera esta misma procesión por la amenaza de lluvias, los cofrades tenían más ganas que nunca de vivir este momento de la Semana Santa.

Abrió el cortejo procesional la Cofradía de la Convocatoria, también con su paso cotitular de la Mujer Samaritana, cuyas costaleras realizaron un extraordinario trabajo. También participó la más joven de las cofradías de nuestra Semana Santa: la de Ntro. Padre Jesús en la Última y Sagrada Cena, seguida por la de la Oración en el Huerto de los Olivos, a hombros de un centenar de residentes internacionales. Siguió el Santísimo Cristo de la Flagelación, cuyo trono estrenado en 2009, vivía su primer Viernes Santo. No faltó San Pedro Arrepentido, originario de la pedanía torrevejense de la Mata, ni Jesús Cautivo Nazareno, que tiño de morado las calles de Torrevieja. Procesionó también Ntro. Padre Jesús de la Caída, con gran solemnidad, así como esa mujer valiente, que es la Verónica. Con aires que olían a Sevilla llegó Ntra. Sra. de la Esperanza y de la Paz, precediendo el paso de la Cofradía del Crucificado, con sus cotitulares de Ntro Padre Jesús de la Salud y María Santísima del Silencio, abrigado el paso estremecedor del Cristo Crucificado que silenció las voces y la algarabía a su paso por Torrevieja. Ntra. Sra. de la Piedad recogía entre sus brazos al Hijo muerto, que descasaría en la Cofradía protagonista del Viernes Santo, como es la del Santo Sepulcro (Yacente) cuya talla salía por vez primera a la calle tras la acertada restauración a la que ha sido sometido por parte de Mariano Spiteri, y en la que también ha sido desinfectada de la carcoma que afectaba a esta devocional imagen de los escultores torrevejenses Rafael y Fulgencio Blanco López, Cerró el cortejo la imagen de San Juan Evangelistas, con su batir de palmas blancas, y la imagen de Ntra. Sra. de los Dolores, convertida en Virgen de Soledad en este Viernes Santo, sobre su nuevo trono. La presidencia civil de la procesión corrió a cargo del primer edil torrevejense, Pedro Hernández, junto al presidente de la Junta Mayor, José Pedro Aldeguer y miembros de equipo de Gobierno del Partido Popular y del Grupo Municipal Socialista, mientras que la religiosa la ostentó el consiliario Manuel Martínez, junto a los sacerdotes Francisco Román y Tomás Álvarez.

Casi al mismo tiempo que la procesión terminaba de salir de la Iglesia, regresaba de nuevo al Templo la cabeza, haciedo que toda Torrevieja quedara abrazada por esta marea de fe y devoción.

También, desde esta casa, se logró mejorar considerablemente la retransmisión en directo del Viernes Santo durante más de tres horas y media de emisión en directo, que ofreció planos hasta ahora desconocidos de nuestros pasos y cofradías, gracias a la nueva cabeza caliente y el refuerzo en la iluminación, así como a un notable esfuerzo por parte de todo el personal de la casa que nuevamente se ha volcado con la Semana Santa torrevejense.