A pesar de que las ordenanzas en vigor sancionan con entre 90 y 1500 euros el no recoger los excrementos de nuestras mascotas en la calle, poco efecto disuasorio se genera. Es por ello por lo que el alcalde, José Manuel Dolón, ha pedido a la Policía Local intensificar la vigilancia y aplicar en todos sus términos las ordenanzas municipales al respecto.